En el informe de los eventos de 2022 en Guatemala que realizó la organización Human Rights Watch (HRW), evidenció que el presidente Alejandro Giammattei y sus aliados profundizaron el deterioro de la democracia en Guatemala, en un aparente intento de evitar la rendición de cuentas por corrupción generalizada, incluso en los más altos niveles del Estado.
Recordó que durante el 2022 las autoridades designaron a la Fiscal General y el Procurador de los Derechos Humanos, mediante procesos de selección que no fueron justos ni transparentes.
«En mayo, Giammattei renovó el mandato de Consuelo Porras como fiscal general. Porras ha bloqueado investigaciones de corrupción e iniciado procesos arbitrarios contra periodistas, fiscales y jueces independientes», señaló HRW.
Asimismo, indicó que sigue siendo problema de gran preocupación el hostigamiento y la violencia contra periodistas y defensores de derechos humanos, así como los desafíos en la protección de los derechos de mujeres y niñas, de personas de la comunidad LGBT y de migrantes.
También mencionó que años de investigaciones han demostrado cómo algunos empresarios han actuado en connivencia con funcionarios corruptos. «El dinero obtenido por medio de actos de corrupción y actividades ilícitas suele utilizarse para financiar campañas electorales», explicó en el informe.
Otros de los temas abordados por HRW es el incumplimiento con el fallo de la Corte de Constitucionalidad dictado en 2020 para la designación de jueces y magistrados de la Corte Suprema de Justicia y Cortes de Apelaciones 2019-2024, así como el despido y persecución contra jueces, fiscales y periodistas independientes.
«El gobierno de Giammattei y la fiscal general Consuelo Porras han generado un clima hostil para el periodismo independiente y los medios de comunicación por medio de ataques verbales, restricciones a la prensa y procesos penales abusivos, entre otros», señaló la Organización, y recordó que sólo durante los primeros seis meses del 2022, la Asociación de Periodistas de Guatemala reportó 66 incidentes de ataques, persecución y criminalización de trabajadores de medios de comunicación.
Respecto al deterioro del Estado de Derecho en el país, mencionó que la alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos dijo en marzo de 2022 que Guatemala enfrentaba “desafíos sistémicos y estructurales”, incluso con respecto a “la lucha contra la impunidad, el espacio democrático y la participación ciudadana”.
Que en junio, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos incluyó a Guatemala, junto con Venezuela, Cuba y Nicaragua, en el capítulo de su informe anual reservado a Estados en donde se registran violaciones de derechos humanos graves, masivas o sistemáticas y ataques serios a las instituciones democráticas. Y un mes después la Comisión Interamericana de Derechos Humanos incluyó a Guatemala, junto con Venezuela, Cuba y Nicaragua, en el capítulo de su informe anual reservado a Estados en donde se registran violaciones de derechos humanos graves, masivas o sistemáticas y ataques serios a las instituciones democráticas.
