Barrientos queda en libertad luego que MP no lograra imputarle delitos

Foto: EFE/Bienvenido Velasco

Ciudad de Guatemala, 17 ene (EFE).- El exministro de Gobernación (Interior) de Guatemala David Napoleón Barrientos quedó en libertad tras descartarse una acusación en su contra por no reprimir manifestaciones en contra del Gobierno del expresidente Alejandro Giammattei y el Ministerio Público (Fiscalía) durante 2023.

La jueza Wendy Coloma, titular del juzgado penal 12 del Organismo Judicial guatemalteco, consideró que las pruebas presentadas por el Ministerio Público para pedir la captura del exministro no tienen relación con los delitos que le imputaron, informó este miércoles esta corte.

Barrientos fue detenido el 11 de enero acusado de no cumplir una resolución judicial que ordenó reprimir y desalojar a los manifestantes en 2023, durante protestas en contra de un golpe de Estado por parte de la Fiscalía.

Los manifestantes pedían la dimisión de la fiscal general, Consuelo Porras Argueta; del titular de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), Rafael Curruchiche y del juez Fredy Orellana, por sus intentos de revertir los resultados de las elecciones que le dieron el triunfo al ahora presidente, Bernardo Arévalo de León.

Las manifestaciones en contra de Porras Argueta empezaron el 2 de octubre pasado cuando comunidades indígenas taparon carreteras y realizaron un plantón frente a la Fiscalía, que se extendió por más de 100 días hasta el pasado 14 de enero.

Barrientos renunció al cargo el 16 de octubre, momentos antes de que la Fiscalía pidiera su destitución por desobediencia civil. El exministro estuvo al frente de la cartera desde enero de 2023 hasta octubre.

Al no admitir las pruebas en contra del exministro, la jueza ordenó la noche del martes su inmediata libertad.

El exfuncionario explicó a periodistas que las pruebas en su contra estaban basadas en videos divulgados en redes sociales y reiteró que durante las inéditas manifestaciones en favor de los resultados electorales se privilegió la vida y los derechos humanos.

Pese a los intentos de la Fiscalía, Arévalo asumió la presidencia de Guatemala para un periodo de cuatro años el pasado domingo, acompañado de su vicepresidenta, Karin Herrera.