AHORA VEREMOS EL NIVEL DE HONORABILIDAD DE LA CC

Editorial

El Organismo Ejecutivo por medio del Secretario General de la Presidencia, Juan Gerardo Guerrero Garnica, presentó ante la Corte de Constitucionalidad (CC) una Opinión Consultiva, en la que cuestiona la honorabilidad de la Fiscal General, Consuelo Porras. Si bien es cierto la Corte trata temas de índole constitucional, nos parece que es oportuna la Opinión Consultiva porque más que una cuestión política se trata de medir incluso la honorabilidad y la moral de la alta Corte.

Es importante conocer los planteamientos que realiza el Ejecutivo en la Opinión Consultiva y llama la atención la primera de ellas que dice: ¿Debe el requisito de reconocida honorabilidad ser cumplido únicamente al momento de optar al cargo público o debe mantener su vigencia durante el ejercicio de la función pública?
¿Por qué decimos que es importante? Porque muchos funcionarios en el ejercicio de sus funciones acaban con esa “reconocida honorabilidad” que establece la Constitución Política, para optar a un cargo público, y esto debido a la corrupción en la que se involucran.

Y es que en un sistema republicano y democrático, estos aspectos deben de ser altamente ponderados para tener funcionarios de alta categoría que respondan a las necesidades de la sociedad en su conjunto y de un pueblo que anhela una justicia implacable.

Ahora veremos cuál es el nivel de honorabilidad y de moral que tienen los “honorables” Magistrados de la Corte de Constitucionalidad al responder si ese requisito es solo para optar el cargo o debe prevalecer durante la función que ejercen. ¿Pero será que esta Magistratura tendrá la solvencia para dar una respuesta contundente, o se saldrán por las ramas ajustándose a la cacareada legalidad de sus acciones?

La Corte tiene una brasa en sus manos pero difícilmente resolverá en contra de la Fiscal General, y ahora menos tras asumir el nuevo presidente, Néster Vásquez Pimentel que junto con Consuelo Porras, ha sido designado como un actor corrupto y antidemocrático, al ser incluido en la Lista Engel por el Departamento de Estado de los Estados Unidos.

Según Estados Unidos, Vásquez Pimentel, “ha socavado las instituciones o procesos democráticos al abusar de su facultad para influir de manera indebida y manipular la designación de jueces en altos tribunales”.

Vásquez Pimentel reencarna entonces a esos funcionarios corruptos que dejan destruida la “honorabilidad” que supuestamente tenían antes de tomar posesión de sus cargos. Sin embargo, creemos que este tipo de personas nunca han tenido principios ni valores que hagan valer, pues con sus acciones han demostrado todo lo contrario.

Ahora veremos el nivel de honorabilidad que tienen los Magistrados con la resolución de esa Opinión Consultiva que tendrá un impacto importante en el actuar de todos los funcionarios.