LOS NUEVOS RICOS DE CADA CUATRO AÑOS

Editorial

El sistema electoral guatemalteco ha permitido que cada cuatro años en el país surjan nuevos ricos a costa de los recursos del Estado, durante ese periodo de tiempo acaparan lo que pueden con tal de robarse todo hasta la esperanza de muchos.

Hoy vemos como el presidente Alejandro Giammattei se alejó por completo del discurso que en campaña propinaba, aquella promesa de disolver a la Secretaría de Asuntos Administrativos y de Seguridad (SAAS), quedó nada más en eso, promesas, y es que ahora muy convenientemente utiliza a los elementos de esa Secretaría para cuidar a los “chuchos” de sus hijos.

Y es que los últimos tres Gobiernos en Guatemala han sido así de miserables, Otto Pérez Molina prometió combatir la violencia con mano dura y ha sido el Gobierno más corrupto de la historia, Jimmy Morales prometió combatir la corrupción y lo que hizo fue todo lo contrario, expulsó a la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), con el único objetivo de proteger a su familia, y Giammattei prometió tantas cosas que nos tiene en este desastre.

Con la investigación realizada por los periodistas Marvin del Cid y Sony Figueroa, sobre los lujosos apartamentos en los que ahora viven los hijos del Presidente, la población debe exigir a Giammattei cuentas claras y que diga de donde salió el dinero para comprarles a sus hijos ese tipo de viviendas.

Por supuesto que no hay que ser tan minuciosos para saber que ese dinero es producto de la corrupción en la que desde que llegó Giammattei al poder ha estado embarrado, por eso precisamente se alió con la Fiscal General, Consuelo Porras, para llamarla su amiga, y no permitir una investigación desde el Ministerio Público en su contra, una tacha más que hace que Porras no sea idónea para ser reelecta.

Y es la familia, que dicho sea de paso defiende el Presidente, ahora resultan siendo los nuevos millonarios que pueden tener a su disposición cualquier cosa porque son miembros de la familia del Gobernante de turno, y eso los coloca en posiciones privilegiadas que muchos no tienen en Guatemala.

Lo que tienen los guatemaltecos es una gran preocupación de cómo sobrevivir en un país que le roba hasta las esperanzas, con gobernantes sinvergüenzas, corruptos y ladrones, incapaces de sacar de la pobreza a miles y mucho menos de combatir la desnutrición, porque sigue siendo una estrategia para los políticos que prefieren ver muertos a los niños de hambre y ganar votos que solucionar el problema de una vez y por todas.

Los guatemaltecos no salimos de una para entrar en otra, cada semana la coyuntura nos agobia porque estamos viendo un callejón sin salida, corrupción e impunidad por todos lados, porque quienes deben de hacer que se cumpla la ley están más ocupados en robar y en garantizarse impunidad, preparando en sus mentes maquiavélicas la persecución y la criminalización de sus críticos.

Estamos asistiendo a un Gobierno que cada día que pasa nos sorprende con sus actos corruptos porque cada vez la escala es mayor. Es urgente que la comunidad internacional se de cuenta de todas las acciones que denuncia la prensa independiente y le cerquen el camino del dinero producto de la corrupción a todos los funcionarios y empresarios que de alguna u otra manera han sido parte de este debacle.