El expresidente Otto Pérez Molina aceptó los cargos de los que se le acusaba en el caso Cooptación del Estado, en búsqueda de ser beneficiado con una reducción de condena.
El mandatario no aceptó su participación directa en los delitos de fraude, cohecho pasivo y lavado de dinero, sin embargo, si mencionó «estar informado de cualquier irregularidad».
Por tal razón, fue condenado a ocho años de prisión conmutables por la jueza Eva Recinos del Juzgado de Mayor Riesgo B.
«Si yo cometí una omisión, error o lo que haya sido, o un delito como aquí se me está acusando, estoy aceptándolo», aseguró Pérez.
El abogado defensor del exmandatario, César Calderón, ya había informado que Pérez Molina se acogería a la figura legal de aceptación de cargos.
Al ser cuestionado en la audiencia por los ostentosos regalos que habría recibido por su cumpleaños, entre 2012 y 2014, cuando era Presidente de la República, señaló que no es extraño que recibiera presentes en esa fecha.
«Cualquier presidente, no solo yo; cualquier persona, no necesita ser presidente, se espera que reciba regalos para la fecha de su cumpleaños», dijo.
El caso Cooptación del Estado surgió de una investigación del MP y la extinta Comisión Internacional en contra de la Impunidad en Guatemala, (CICIG), en la que funcionarios públicos lavaban dinero para captar fondos para la campaña electoral del Partido Patriota en 2011.
