En los últimos meses los guatemaltecos hemos vuelto a ver como la violencia se apodera de las calles, la zozobra y el temor nos invade, porque no sabremos si al salir de nuestras casas vamos a regresar con bien, y es que la violencia se ha estado exacerbando en nuestro país producto de la impunidad generalizada.
La falta de castigo para quienes cometen un crimen es sin duda una de las causas por las cuales la violencia se ha vuelto algo cotidiano. Es alto el grado de deshumanización al que nos tienen acostumbrados que es normal ver balaceras y muertos en plena carretera, sin inmutarnos por un momento de que se trata de un ser humano que ha perdido la vida por un hecho violento.
La semana pasada un grupo armado en un vehículo que se conducía en las cercanías al Cementerio Las Buganvillias, en la zona 6, irrumpió la cotidianidad del tránsito de las mañanas, atacando con lujo de violencia a los tripulantes de un Pick-Up, sin importar que por el lugar transitaban otras personas que podrían también haber resultado heridas o muertas. En ese hecho murió una persona y dos más resultaron heridas, se sabe que era personal que laboraba en una empresa de seguridad, sin embargo, se desconoce el móvil del ataque armado en su contra.
Otro hecho de violencia se registró en el Bulevar Los Próceres, zona 10, en el que se reportó la muerte de una persona que se dedicaba a dar préstamos. En otro lugar, en la zona 4 de Mixco los Bomberos reportaban el fallecimiento de una mujer que tenía en brazos a su pequeño hijo, la primera versión del hecho fue que había sido atropellada, sin embargo, el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) determinó que la causa de la muerte de la mujer había sido por un impacto de arma de fuego.
Esas son imágenes que día a día los medios de comunicación informamos a los guatemaltecos, y que las autoridades responsables como el Ministerio de Gobernación a cargo de Gendri Reyes, y la Fiscal General del Ministerio Público (MP), Consuelo Porras, nada hacen para proteger a la ciudadanía que esta desamparada ante la creciente violencia que está azotando de nuevo a Guatemala.
Pareciera que el trabajo de Reyes y Porras es estar cubriendo la corrupción y generando la impunidad para que se siga acrecentando la violencia, sin mover un solo dedo y dejando a la ciudadanía a merced de la delincuencia.
Esta violencia imparable nos regresa a una década atrás, cuando la promesa era la mano dura para acabar con ese flagelo, pero era una estrategia en año preelectoral para elegir a Otto Pérez Molina, esa misma estrategia la están utilizando para que ahora sí le toque a Zury Ríos, la virtual candidata presidencial del partido Valor, quien tiene una prohibición expresa en la Constitución y que solo con un fraude de Ley podrá ser inscrita en el TSE.
Los guatemaltecos esperamos una respuesta clara y contundente de parte de las autoridades del Ministerio de Gobernación, la Policía Nacional Civil, el Ministerio Público y el Organismo Judicial, para que se castigue a todo aquel delincuente que genera violencia y que no quede en impunidad ni un solo crimen para no seguir lamentando la muerte de miles de guatemaltecos por una estrategia política mal intencionada.
