En un burdo montaje el Gobierno de Guatemala quiere criminalizar las protestas genuinas que se realizan en su contra, por corruptos, incapaces y sinvergüenzas, que a toda costa buscan quedarse en el poder.
Guatemala no es la misma desde aquel 2015 en el que todos nos unimos para manifestar en contra de la corrupción que continúa y con más fuerza, en esta oportunidad no hay distractores como el proceso de elecciones para disuadir a la población de que con ir a votar vayan a cambiar las condiciones, ahora con la firmeza que caracteriza a los guatemaltecos buscarán un cambio verdadero en el sistema y que renuncie quien tenga que renunciar.
Durante el fin de semana el aparato estatal realizó todo un manual de inteligencia en contra de las manifestaciones pacíficas, robaron un autobús, lo quemaron a un costado de la Plaza de la Constitución, agredieron a los agentes de la Policía Nacional Civil (PNC), que actuaron como víctimas y colocaron a supuestos miembros de pandillas disfrazados de inconformes, todo para que a los ojos de la Misión de la Organización de los Estados Americanos (OEA), el Estado no fuera el represor, sino que eran los actos vandálicos que provocaban la violencia en contra las manifestaciones.
Lo que estamos diciendo es que el mismo Gobierno de Guatemala es el principal responsable de los actos de violencia vividos en la jornada 28N, al infiltrar a miembros de las pandillas para incitar a la violencia, atacando a los Policías, a los delegados de la Procuraduría de los Derechos Humanos (PHD) y a periodistas, cuando claramente sabemos que esto no lo hacen los guatemaltecos que manifiestan su descontento pacíficamente.
Este burdo montaje pareciera ser un pacto entre el Ministerio de Gobernación con los miembros de las pandillas, hay abundante material fotográfico y de video para demostrar que las personas infiltradas tienen un perfil de pandillero.
Y como todo hecho pactado tiene incluso mensajes alineados de las autoridades, que no son casualidades. El sábado el presidente del Congreso, Allan Rodríguez, solicitaba la inmediata intervención del PDH para garantizar los derechos de los guatemaltecos incluyendo a los agentes de la PNC, una jugada pactada para que los mismos corruptos de siempre busquen la destitución del Procurador.
Entre tanto las autoridades del Ministerio de Gobernación continuaron con el ataque a la PDH, en un mensaje a altas horas de la noche del domingo. El ministro de Gobernación, Gendri Reyes y autoridades de la PNC, acusaban al PDH de no cumplir con instrucciones en la manifestación. Así funciona el pacto de corruptos, porque se sabe que este lunes en la Sesión del Pleno del Congreso, intentarán remover de su cargo al PDH, algo que seguro la ciudadanía honesta no lo permitirá.
Guatemala no necesita de esos montajes absurdos, porque las demandas de la población son genuinas y sobre todo pacíficas, No volvamos a los años de la represión, ni un paso atrás. Guatemala nunca más.
Este es un día para expresar nuestra solidaridad a cada periodista que ha sido agredido. Pero también para felicitarlos en su día, una labor que cada vez se vuelve más peligrosa, pero que el poder no podrá silenciar jamás. Feliz día del periodista.