El pleno del Congreso de la República aprobó en tercer debate el pasado miércoles el Proyecto de Presupuesto General de Ingresos y Egresos para el ejercicio fiscal 2023, siendo el presupuesto más alto de la historia del país para año electoral.
Este fue aprobado en su redacción final con 114 votos a favor, el cual también fue apoyado por los alcaldes de la Asociación Nacional de Municipalidades (ANAM) quienes aseguraron que era un paso grande en el municipalismo y presentaron una carta por cada comuna (308) para que fuera aprobado.
“Durante muchos años nos hemos dado cuenta que el municipalismo no ha tenido el apoyo que hoy sí tienen con el situado constitucional de obras extraordinarias áreas sociales, obras social, en salud y educación, recibieron plazas, somos testigos que antes no se había dado”, dijo el presidente de la ANAM, Francisco Mejía.
El techo presupuestario fue modificado por Q115 mil 443.7 millones, siendo Q1 mil 512 millones más que el presupuesto dictaminado por la Comisión de Finanzas Públicas y Moneda del Legislativo.
El Proyecto del Presupuesto recibió dictamen favorable por la Comisión de Finanzas el pasado 17 de octubre, por un monto de Q113 mil 985 millones, unos Q1,636.97 millones más del monto inicial presentado por el Ministerio de Finanzas Públicas (Minfin) que fue de Q112 mil 294.80 millones, y que ahora supera los Q115 mil millones.
Este sería el presupuesto más alto de la historia de Guatemala, y se ejecutaría durante el último año de la gestión del presidente Alejandro Giammattei y en medio de un proceso electoral.
Se presume que la aprobación del presupuesto forma parte de la alianza entre el oficialismo y Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) con el cual lograron la reelección de Shirley Rivera para la Junta Directiva del Congreso, así como la inscripción de Sandra Torres como candidata presidencial para el proceso electoral de 2023 y excluir a los candidatos Zury Ríos y Edmond Mulet.
A este presupuesto se opuso la Bancada Semilla a la cual pertenece el diputado Samuel Pérez, quien durante la sesión plenaria dijo: «Hoy se reúnen aquí (Congreso) los más grandes tiradores de la patria a aprobar un presupuesto en contra del pueblo de Guatemala», y recordó que en la Comisión de Finanzas solo leyeron siete páginas de más de 150 que conforman dictamen.
«No leyeron el dictamen porque vieron que si incluía lo que les interesaba, que era dinero para pagar su campaña», dijo.
Por su parte, la diputada Andrea Villagran aseguró que este presupuesto «no representa las necesidades y las demandas de la población guatemalteca».
Asimismo, la diputada dijo que el aumento al Presupuesto 2023 va destinado a proyectos de infraestructura y proyectos clientelares y quitaron presupuesto al Ministerio de Salud para supuestos proyectos de desarrollo.
Ante esto, un grupo de manifestantes, aparentemente salubristas cerraron las entradas y salidas del Congreso como medida de oposición a que se aprobara el Presupuesto sin incluir recursos para poder cumplir con sus demandas de aumento salarial.
El presidente Alejandro Giammattei, por medio de su cuenta de Twitter agradeció al Congreso la aprobación del Presupuesto, quien aseguró que permitirá «ampliar los programas y proyectos productivos de beneficio para la población vulnerable y fortalecer el poder local».