MANO DE MONO

¡Hicieron mano de mono! Esta es la expresión coloquial que utilizamos los chapines para afirmar que un grupo de personas robó, hurtó, estafó, se enriqueció de forma ilegal y en el menor de los casos timó a un tercero. Justo de estas acciones ilícitas y de otras conductas delictivas son acusados varios funcionarios del gobierno del Partido Patriota, por lo que enfrentan diferentes casos penales.

El ex ministro de comunicación, Alejandro Sinibaldi, no es la excepción, él formó parte del gabinete de Otto Pérez Molina. La entrega de este actor, después de cuatro años de estar prófugo, tendrá connotaciones en la gestión de causas judiciales y en la política, con tanta importancia que impactará en ámbitos públicos y privados.  

Además de la continuidad de los cinco procesos que enfrentará, se promoverán nuevas acusaciones; ya lo anunció en su primera aparición e intercambio con la prensa: “Yo no me mando solo (…) vengo a contar la verdad, y contar la verdad significa muchas cosas, les pongo un ejemplo…. Los creadores del sistema de corrupción en el Ministerio de Comunicación son los constructores…. para lograr adjudicarse prácticamente a dedo las obras que a ellos que les interesa.” Declaración que lleva implícita un aviso a los constructores que de una u otra manera se encuentran implicados en ilegalidades.

Probablemente, no será el único sector que quede al descubierto. Existen altas posibilidades que a raíz de las declaraciones del ex funcionario y de las investigaciones del Ministerio Publico se revelen otros actos corruptos y sean distintas las personas que enfrentan juicio, en especial actividades relacionadas con la elección de las autoridades judiciales 2014-2019, como lo pronosticó la Comisión Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) en el informe de Comisiones Paralelas II, antes de terminar funciones en el país.

Tendremos que ser pacientes, pues la información que provea el señalado, así como el resultado de las investigaciones del Ministerio Público, al principio, no serán públicas. Esto debido a que, con muy buen tino, el Ministerio Público solicitó al Juez a cargo del caso la reserva parcial del proceso, a lo que el juzgador accedió.  Esta decisión judicial significa que algunas de las actuaciones no serán conocidas por todas las partes, y menos por la sociedad. Esto lo permite la ley en el artículo 314 Código Procesal Penal con el objetivo de: proteger y aislar indicios en los lugares en que se investiga a efecto de evitar la contaminación o destrucción de rastros, evidencias; resguarda a testigos, peritos y operadores de justicia; evitar fuga de información; no permitir que se alerta a otros posibles implicados así impedir que se escapen y facilitar su captura y detención. 

Nosotros los ciudadanos estaremos atentos a conocer la dimensión y características de la mano de mono que informó conocer el ex ministro, así como a los diferentes monos que se apoderaron de nuestros impuestos y se enriquecieron de forma ilegal.  Y en el momento oportuno deberemos de proponer y exigir acciones legislativas, de control sobre el erario público, de transparencia y gestión del gasto que sean eficaces para abatir la corrupción, ese mal que sumerge a Guatemala en la pobreza y en el subdesarrollo. ¡No podemos ni debemos quedar pasivos ante ese cáncer político, social y económico que es la corrupción!