Guatemala entre los cinco peores países, según el Índice de la Percepción de la Corrupción

Foto: Epicentro

Guatemala se encuentra entre los cinco países peores calificados de América, tres de ellos son centroamericanos, según el Índice de Percepción de la Corrupción 2022 presentado por Transparencia Internacional.

De acuerdo a ese indicador, Guatemala tiene una calificación por debajo del promedio de la región peor calificada a nivel mundial.

El país fue calificado con 24 puntos, es decir, que el gobierno de Alejandro Giammattei es el peor calificado en la Percepción de la Corrupción.

En los últimos diez años que abarcan los gobiernos de Álvaro Colom, Otto Pérez Molina, Jimmy y Alejandro Giammattei, Guatemala ha caído del puesto 91 en el año 2010 al 150 en el 2022, es decir, ha caído 59 posiciones.

Guatemala se posiciona en el puesto 122 de 180 países, y tiene una nota histórica más baja desde que se mide el Índice de Percepción de la Corrupción.

Entre los factores que incidieron fue el incremento al Presupuesto Nacional elncual se ha traducido en aumento del gasto público en rubros con altos riesgos de corrupción. A mayor gasto público, mayor opacidad.

Otro de los factores fue estar colocado en la lista negra de los países donde se observan violaciones de Derechos Humanos, según la Comisión Internacional de los Derechos Humanos.

El país ha perdido la capacidad de combate a la corrupción con la persecución y exilio de operadores de justicia independientes, fiscales y jueces, lo que ha significado impunidad para los actores corruptos y criminalización para los activistas anticorrupción.

Edie Cux de Acción Ciudadana indicó que el rumbo del gobierno de Giammattei ha llevado a calificar al país entre las peores naciones a nivel latinoamericano, «sólo hay países peores como Nicaragua, Venezuela y Haití», dijo.

De acuerdo con Cux, desde el 2020 por la pandemia, especialmente el año pasado, cuando se dieron ampliaciones presupuestarias y se quitaron los candados a los Consejos de Desarrollo, implicó un mayor presupuesto pero no una verdadera inversión para la gente.

«Se privilegian bolsos de corrupción en donde prácticamente el dinero se esfuma, no se ve qué beneficios trae para la población, no se ven mejores carreteras o escuelas, ni mejores condiciones de vida, hay más presupuestos, se recauda más pero no llega a beneficiar a la población general», agregó.

Asimismo, dijo que de cara al proceso electoral, el aumento presupuestario será utilizado para financiar campañas, es decir que los fenómenos que más van a darse es la compra de votos. Uno de los elementos importantes que incidió es el debilitamiento en la capacidad de combatir la corrupción, eso impacta exactamente en la percepción que se tiene fe la corrupción en Guatemala, «lejos de perseguir a los corruptos se está criminalizando a operadores de justicia que han investigado casos de corrupción y eso, obviamente está en el imaginario social», aseguró.